Drácula de Hacendado - Drácula A.D. 1972
Reseña de Drácula A.D. 1972 (Alan Gibson, 1972) con respecto a Drácula (Bram Stoker, 1897)
Drácula A.D. 1972 (Alan Gibson, 1972)
Adaptación: deja que me ría
Obra como tal: festival setentero bastante divertido
Película vista junto a un té digestivo.
SPOILERS AHEAD!
Vale, lo admito, esta solo la he puesto porque no la había visto y me apetecía ver un poco más de Lee como El Conde. En cualquier medio serio que se precie, jamás aparecía para ser comparada con la obra de Stoker. Entre eso y que la película en sí misma mucha chica no tiene (tetas sí, pero chicha chica, no), esta reseña será tirando a breve.
Esta película ya ni siquiera finge tratar de adaptar Drácula (Bram Stoker, 1897), sino que es una secuela directa de la previamente por aquí reseñada Drácula (Terence Fisher, 1958), repitiendo tanto Conde como Van Helsing a pesar de haber pasado unos… ¿cien años en la línea temporal? El poder de la tensión sexual homoerótica enemies-to-lovers, supongo. Así que, si entras en ella esperando aunque sea el más mínimo atisbo de fidelidad a la obra de Stoker…pues tienes de nuevo a Lee sabiendo mostrar en más de una ocasión actitudes que me hacen decir «Ah, ese es mi Conde, qué hijo de la gran…», pero decir que esto son migajas es ser generoso.
Por lo demás, a no ser que se quiera ser extremadamente puntilloso, la mayoría de los «Si te gusta….» que he hecho se aproximan más. Como mucho, puedes intentar leer intentos de paralelismo mal ejecutados en meter a un periodista, para dar a entender una posterior narrativa epistolar; tener a un grupo de protagonistas jóvenes que funcionarían bienn como grupo similar al protagónico de Drácula, siendo torturados por el Conde; y que la relación entre Van Helsing y su nieta sí que tiene algunos tintes de la relación original de Van Helsing y Mina.
Y hasta aquí se puede leer, y creo que he pensado más que ellos.
Ahora bien, la película como tal es MUY ENTRETENIDA. No aporta absolutamente nada más que este puro entretenimiento, pero te hace pasar un rato muy divertido. Cushing (Van Helsing) y Lee se lo están pasando teta, hay un personaje femenino con un mínimo de personalidad y Alucard (Christopher Neame) es todo carisma y FACE CARD.
Además, tiene una selección musical maravillosa (en hortera, por supuesto) absolutamente setentera y la duración justa para que no se haga pesada pero tampoco apresurada. Y hay un momento en el que se fabrica una estaca de madera que haría a Buffy Summers [Buffy Cazavampiros (el Hijo Puta Joss Whedon, 1997-2003)] sentirse orgullosa y, de nuevo, la química de Van Helsing y Drácula es de todo menos heterosexual.
Especialmente cuando, a pesar que durante toda la película se hace mucho hincapié en cómo estos personajes jóvenes son los protagonistas de la historia, todos acaban despachados (salvo la muchacha a salvar, por supuesto) y son estos dos señores que para nada tienen sentimientos muy complicados por el otro los que se enfrentan en un combate final que, para mi gusto, se alarga un poco-demasiado más de la cuenta.
Esto es uno de los puntos que más handicapea la película para mí, junto con el tratamiento general del elenco femenino, por mucho que antes haya mencionado que hay una unidad de muchacha con agencia. Son los setenta y se nota y no siempre para bien.
Y esto es todo. He sido muy breve, pero este es justo el tipo de películas que se agradecen existen para esos días en los que tu cerebro quiere desconectar del todo. Ahora os dejo aquí con la disponibilidad y la versión en inglés mucho más reducida de mi opinión de la película (y con comentario chorras habitual, à la los capítulos de Drácula normales):
· Disponibilidad actualmente de Drácula A.D. 1972 (1972)
· Si no, demos gracias a Internet Archive por existir.
· Mi Reseña en Letterboxd